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Capítulo 2. Sueño de medianoche (2/2): Cuando la madera seca se encuentre con el fuego, el trueno celestial bendecirá a los terrestres 

Eran las doce de la noche, momento propicio para el Reino Demoníaco; cuando una ráfaga de tambores y gongs resonó en el patio, despertando a Xie Chen al instante.

Su maíz, sorgo, papas, arado, el sudor, su trabajo duro... todo había desaparecido.

¿Dónde estaban sus cosas?

Xie Chen se frotó los ojos y miró a su alrededor. En un instante, le pareció que un rayo le había atravesado de la cabeza a los pies.

«¡Santo cielo! Aún no he terminado mi misión y ya me he quedado dormido».

Se puso de pie de inmediato, sin olvidar frotarse la parte posterior del cuerpo para eliminar la suciedad acumulada. Con celeridad, extrajo una botella de agua de su bolsillo, la cual contenía las lágrimas de Nuwa, y se marchó dando saltitos con la botella en brazos.

Deseaba que la litera todavía estuviera en la mansión, o de lo contrario, ¡su título de mejor empleado se le daría a otra persona!

Sin embargo, cuando Xie Chen corrió hacia la litera, quedó atónito por un momento.

Una, dos.

¡¿Cómo es posible que haya dos literas idénticas?!

¿De dónde vino la otra? ¡¿Por qué él, un transmigrado, no sabía de esto?!

Los años de experiencia que tiene Xie Chen en la transmigración de libros, le ayudaron a saber que que lo que estaba ocurriendo ahora podría ser una consecuencia de las lagunas que tiene la trama de esta novela. Por ejemplo, en la trama no habían dos literas, y ahora tiene que descubrir en cuál litera están escondidos Xuan Qing y Shen Yuheng antes de que la trama siga avanzando.

Cuando el gallito está indeciso, ¡a quien el gallito señalé será el indicado!

Las yemas de sus dedos se movían con ritmo constante, chasqueando una y otra vez, hasta que finalmente se posaron con determinación al costado derecho de una litera. Xie Chen inhaló profundamente, sujetó la botella de vino que contenía las lágrimas con firmeza –como si estuviera al borde del colapso– y se acercó con cautela para abrir la cortina de la litera.

La novia...

«¿Eh? Esta cortina es muy pesada, ¿por qué no puedo abrirla?».

Xie Chen ejerció una fuerza considerable para tirar, pero la delgada cortina de la litera se mantuvo inamovible, como una montaña inquebrantable.

«¿Qué está pasando? ¿Tiene pegamento 502?».

Siguió tirando de la cortina con fuerza durante mucho tiempo, pero fue en vano. Xie Chen finalmente se rindió, parecía que este gallito se había equivocado, quizá debería haber ido a la otra litera.

Se dio la vuelta, dispuesto a irse a la otra litera.

La cortina de la litera seguía cerrada, pero Xie Chen decidió llamar con cautela.

¿Novia?

Un ruido extraño provino del interior, y cuando Xie Chen estaba confundido, una voz clara e indiferente preguntó:

¿Quién?

Xie Chen se sobresaltó por la voz y quedó atónito por un largo tiempo, antes de recordar que todavía tenía una misión por cumplir.

Ya ha subido a la litera dijo apresurado, y el Señor Demonio me ha ordenado que le traiga algo de beber.

No quiero respondió la misma voz gélida.

Sin embargo, Xie Chen ya esperaba que Xuan Qing se negara, por lo que ya había preparado un discurso.

El Señor Demonio me ha ordenado que debe beberlo; aún queda un largo camino por recorrer antes de llegar al Palacio Demoníaco, así que debería aceptar este gesto. El Señor Demonio teme que tenga sed durante el camino, y yo tengo que cumplir con mis obligaciones.

«Perfecto».

Sus palabras fueron perfectas y fluidas, sin un solo error. Xuan Qing ciertamente no podría encontrar una razón para rechazarlo.

Como era de esperarse, una mano huesuda emergió de la cortina roja de la litera, abriendo una rendija.

Xie Chen miró con curiosidad la litera, debido a que en la novela no habían hombres que superaran la belleza de Xuan Qing y Shen Yuheng en el mundo del cultivo, por lo que esperaba con ansias presenciar sus apariencias. A pesar de que ha visto a muchos hombres atractivos, no podía reprimir su interés cada vez que se encontraba con una escena así.

Pero, antes de que pudiera vislumbrar con claridad el rostro del apuesto hombre que había adentro, fue agarrado por la muñeca y arrastrado hacia dentro de la litera junto con la botella que contiene las lágrimas.

Una vez que Xie Chen sintiera como el mundo giraba a su alrededor, perdió el equilibrio y tropezó, cayendo de rodillas dentro de la litera. Antes de que pudiera abrir la boca, una espada larga, afilada y brillante, ya estaba apuntando a su garganta.

Sus ojos se abrieron ante la sorpresa, casi perdió el aliento y los latidos de su corazón eran tan fuertes que parecían advertir que su corazón saldría por su garganta.

«Esto es... ¡Esto es peligroso!».

¡Estuvo a punto de perder la vida!

Xie Chen miró hacia arriba, observando cada detalle de la larga espada. Xie Chen entró en un estado de shock, sobre todo al ver el par de ojos negros, penetrantes, inhumanos y escalofriantes del hombre.

«Este hombre es muy atractivo, pero la mirada en sus ojos da mucho miedo, parece que me comerá en cualquier momento».

Ha transmigrado a diversos libros por más de diez años. ¿Qué tipo de protagonista no ha visto? Es por eso que Xie Chen no puede tener miedo, así que se consoló y se obligó a calmarse lo más rápido que pudo.

Novia... baje la espada.

Las cejas del hombre, que estaban ligeramente levantadas, no se relajaron ni un poco e inspeccionó con la mirada a Xie Chen.

¿Qué tienes en la mano?

«Ya me quiero ir...».

«Oh sí, las lágrimas de Nuwa».

Al ser mirado por él, Xie Chen ya casi se olvidaba de su trabajo. No pudo evitar sentirse molesto. Su comportamiento no ha sido nada profesional este día; sus compañeros seguramente dirán que los está avergonzando.

Fue Su Santidad quien me ordenó traerle esta agua.

Se apresuró a entregar las Lágrimas de Nuwa con ambas manos y, cuando miró al hombre, vio por casualidad a otro atado detrás de él, con la cara magullada e hinchada, llena de mucosidad y lágrimas que corrían por su rostro, como si acabaran de darle una paliza.

¡Ayuda! El desafortunado secuestrado cayó de rodillas frente a Xie Chen y gritó: ¡Ayúdame, me va a matar!

«Espera, ¿quién es este?».

«¿Shen Yuheng acaba de golpear al protagonista?».

«Claro que no, Shen Yuheng es el hermano mayor de secta de Xuan Qing, pero el cultivo de Xuan Qing es más avanzado que el suyo. Es imposible que el protagonista se dejara golpear de una manera tan miserable, ¿podría tratarse de un personaje secundario?».

Al notar la mirada de Xie Chen, el hombre esbozó una sonrisa enigmática, aunque esta no iluminó su rostro, lo que provocó un estremecimiento en su columna.

¿Qué tanto viste?

Xie Chen no había considerado el asunto con la debida atención y, tras expresar su confusión, murmuró.

Ngh.

La litera, ya de por sí angosta, parecía adquirir una apariencia aún más estrecha a causa de la presencia de Xie Chen. Shen Yuheng, con una expresión impasible, alzó sus cejas y casualmente propinó un golpe a la novia, quien quedó inconsciente. Después, la pateó fuera de la litera con una determinación implacable. Su mirada se desplazó con lentitud hacia Xie Chen y dijo:

Llegas justo a tiempo, es hora de un interrogatorio.

Ngh... ¿Ah? Finalmente, Xie Chen reaccionó al hecho de que la persona a la que habían golpeado hasta que su rostro quedó ensangrentado no era Shen Yuheng ni Xuan Qing, ¡sino la novia del Señor Demonio!

Xuan Qing no está aquí, y en su lugar, ¡se encontró con que Shen Yuheng acababa de torturar a la novia!

«Santo cielo, mientras dormía, la trama ya se ha descarrilado y ya no podré saber qué pasará».

Xie Chen sostuvo la pequeña y lastimosa botella con las Lágrimas de Nuwa y bajo la fría punta de la espada, lloró sin derramar una sola lágrima y abrió la boca con dificultad.

No vi nada, lo juro. Solo vine a entregar esta agua, pero como la novia no está aquí, supongo que me equivoqué.

La otra parte resopló con frialdad.

¿Te equivocaste?

Xie Chen asintió con la cabeza, lleno de lágrimas, como una gallina picoteando arroz.

Los ojos de Shen Yuheng se posaron en la pequeña botella que Xie Chen tenía en la palma de la mano. Lentamente, subió la mirada y examinó cuidadosamente la expresión de Xie Chen, dónde podía leer con claridad “culpable como un ladrón”.

Su mente recordó de repente la declaración que había hecho cuando había interrogado a la novia.

La novia dijo que no quería casarse con Chu Sining, pero como este hombre quería tener un hijo con una persona que hubiera cultivado hasta la etapa del Alma Naciente para tener un hijo, fue que lo secuestraron.

Pero, si su verdadero propósito para casarse es tener un hijo, no tendría sentido que se casara con un hombre estéril.

Este estúpido cultivador demoníaco apareció de la nada y tenía una mirada culpable; aún tenía que entregar la botella con las lágrimas.

Pensando en esto, la cara de Shen Yuheng se ennegreció gradualmente, movió la punta de la espada lejos de la garganta de Xie Chen y pinchó la pequeña botella de agua que todavía estaba en su mano.

Toma un trago, te veré dijo.

Xie Chen soltó un suspiro de alivio al oír eso, pero poco después su corazón volvió a preocuparse, así que se apresuró a explicar:

Esto no es para que lo beba yo, ¡es para que lo beba la novia!

Al oír esto, Shen Yuheng entrecerró los ojos y permaneció en silencio.

Al ver que no decía nada, el corazón de Xie Chen palpitó cada vez más rápido, por lo que se puso a explicar lo que venía a hacer lo más rápido posible:

Solo cumplo las órdenes de mi Señor Demonio. Me dijo que solo la novia puede beberlo; si me atrevo a beberlo, mi Señor Demonio me matará.

Como transmigrante, no puede contarle la trama porque, si lo hiciera, estaría violando las reglas. Es tan desafortunado.

No paraba de pensar en Shen Yuheng. La novia, que estaba a su lado, tenía las manos y los pies atados y estaba inconsciente. Si lo bebiera, definitivamente sería tomado por Shen Yuheng, entonces... ¿Qué pasaría con la futura felicidad de Xuan Qing?

Tan pronto como terminó de hablar, Shen Yuheng movió la punta de su espada otros tres centímetros más cerca del corazón de Xie Chen. 

«Es sólo un trago de agua, ¿por qué tendría miedo? ¿Podría ser veneno?».

Los ojos de Xie Chen se volvieron cada vez más oscuros y sintió que la espada estaba a punto de atravesar su ropa y su carne. Quiso llorar durante mucho tiempo pero no tenía lágrimas, a pesar de ello, él todavía intentó forcejear un poco.

Por favor, ¿puedo no beberlo?

Shen Yuheng sonrió con suavidad y dijo con compasión: 

Si no lo bebes, morirás.

La voz fría llegó a sus oídos y el corazón de Xie Chen finalmente murió.

«Xuan Qing, lo siento, fue tu esposo quien me obligó a beber esto».

Shen Yuheng miró fijamente a Xie Chen y vio que su carita cambiaba de azul a negro, de negro a verde y, finalmente, a un color pálido, como si no tuviera deseos de vivir. De repente tuvo la ilusión de que estaba intimidando a un hombre honesto.

«¿Cómo puede un cultivador demoníaco tener tanto drama?».

«Para poder convertirse en el confidente del Señor Demonio y asumir una tarea tan importante como entregarle cosas al Señor Demonio, debe haber matado a muchas personas en su vida diaria. No merece ninguna simpatía».

Xie Chen desenroscó temblorosamente la tapa de la pequeña botella y una extraña fragancia dulce llenó al instante toda la litera.

Cerró lentamente los ojos –con aire de sacrificar su vida por la justicia–, acercó la botella a sus labios y bebió un sorbo con dificultad, como si bebiera un cuchillo, sujetándola en su boca y le resultara difícil tragar.

Shen Yuheng se sentó frente a él, con la mirada fija en sus acciones, sujetando con cierta impaciencia su espada y dándole suaves palmaditas en un costado de la cara. 

Bebe grandes tragos.

Xie Chen se estremeció y tuvo que cerrar los ojos con fuerza; rápidamente tomó un gran trago.

De repente, su mente comenzó a retroceder en el tiempo y recordó la alegría de cultivar todos los días cuando era un esposo carne de cañón en una novela de agricultura. Cada día sólo tenía que preocuparse de si los cultivos crecían bien y no de si los personajes principales arruinarían la trama. Después de un duro día de trabajo, llovía mucho afuera y él se acostaba en su pequeña cama y abrazaba a un gatito para dormir. Aquellos días fueron tan hermosos. Pero ahora su alegría se quebró y tuvo que beberse esto.

El líquido transparente fluyó por sus labios carmesí, pasó sobre la pequeña y blanca manzana de Adán, recorrió su clavícula y empapó una pequeña zona de la solapa sobre su pecho.

Shen Yuheng se quedó mirando el flujo del agua durante mucho tiempo, sin saber dónde estaba mirando, y de repente miró hacia otro lado.

Parecía que le había llevado toda una vida beber un trago de las Lágrimas de Nuwa. Después de que Xie Chen se lo tragó todo, de repente abrió los ojos y no sintió nada en su cuerpo.

«¿Por qué? ¿Podría ser que tenga un físico que me haga inmune a las Lágrimas de Nuwa?».

«¡Eso es genial, entonces no me convertiré en el amante rompe hogares entre Shen Yuheng y Xuan Qing!».

Xie Chen no había estado feliz ni dos segundos cuando de repente sintió que un calor aumentaba en su. Quedó aturdido por un momento, y sus piernas y pies parecieron derretirse por el extraño calor, ni siquiera pudo reunir un gramo de fuerza.

¿Qué te pasa? Naturalmente, Shen Yuheng notó que algo andaba mal con él. Frunció el ceño ligeramente y comenzó a preguntarse si bebía agua o afrodisíaco, razón por la cual reaccionó así.

Yo, yo... Xie Chen ni siquiera pudo pronunciar una frase completa en ese momento, y su cuerpo comenzó a emitir una dulce fragancia exactamente igual al aroma de las Lágrimas de Nuwa. Todo su cuerpo estaba rojo como un melocotón maduro, y su cuello, sus muñecas e incluso sus tobillos que estaban parcialmente expuestos estaban extremadamente rojos y sensibles.

No estaba seguro si era debido al dulce aroma o si estaba afectado por algo más, pero el cuerpo de Shen Yuheng en realidad comenzó a sentirse un poco caliente.

Inmediatamente se dio cuenta de que la anormalidad en su cuerpo era causada por el agua. Apartó la mirada de Xie Chen, frunció el ceño y dijo con voz grave: 

¡Vete!

Por supuesto, también podría matar a Xie Chen directamente, lo que sería mucho más simple. Sin embargo, cuando se encontró con esos ojos llorosos y vio el delgado cuerpo de Xie Chen acurrucado en la esquina de la litera con una mirada agraviada en su rostro, se sintió un poco... incapaz de hacerlo.

Era un animalito lastimoso y frágil, que temblaba y lloraba si lo tocaban.

La culpa era demasiado pesada para que él apuñalara a Xie Chen hasta la muerte con su espada, por lo que decidió simplemente echarlo.

Shen Yuheng estaba a punto de levantar la cortina para echarlo, pero descubrió que la cortina no se podía abrir, extendió su mano para intentar arrancarla y se dio cuenta de que había una formación de distracción adjunta.

«¿Quién lo hizo?».

Al instante, Shen Yuheng tuvo la respuesta. Apretó la espada en su mano, respiró profundamente y luego, con una fuerte intención asesina, recitó palabra por palabra:

¡Xuan, Qing!

Dentro de la otra litera, Xuan Qing estaba tan feliz que se recostó en el asiento y quiso dar vueltas. Estaba tratando de contener la risa con tanta fuerza que no podía respirar, y cuando pensó en el rostro muerto y la expresión desanimada de Shen Yuheng, quiso reír aún más.

Acababa de escuchar que el pequeño cultivador demoníaco vendría a entregar las Lágrimas de Nuwa, por lo que se volvió cauteloso. Cuando vio que el pequeño cultivador demoníaco había entrado, salió inmediatamente y dibujó una formación irrompible en la litera de Shen Yuheng; por cierto, también los ayudó a ocultar a la novia inconsciente.

Él es muy amable.

Shen Yuheng ciertamente puede romper esta formación, pero le llevará al menos un cuarto de hora. ¿Podrán Shen Yuheng y el pequeño cultivador demoníaco que se encuentra dentro sobrevivir este cuarto de hora?


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